El director de
Análisis del Centro Nacional para la Investigación Atmosférica de Estados
Unidos, Kevin Trenberth, dio a conocer este viernes que los efectos del huracán
Sandy fueron más intensos debido al cambio climático.
El fenómeno meteorológico que azotó varios
países en Centroamérica y la costa noreste de los Estados Unidos tuvo mayor
intensidad debido al cambio climático, de acuerdo con el director de Análisis
del Centro Nacional para la Investigación Atmosférica de EEUU. Explicó
Trenberth que el fenómeno meteorológico, que devastó amplias zonas del Caribe y
de la costa oeste estadounidense es una tormenta digna de recibir el adjetivo
de "histórica", por cómo se elevó la temperatura del mar hasta dos
grados.
Agregó que debido a ello, hubo 10% más de agua
evaporada de los mares, alimentando el sistema del ciclo del agua, y en
consecuencia, se generó un 20% más de
lluvia.
Trenberth afirmó estar seguro que tanto este huracán
como el resto de acciones meteorológicos extremos ocurridos en 2012 “hubieran
sucedido seguramente sin cambio climático, pero no hubieran roto todos los
récords conocidos ni sus efectos hubieran sido tan mayúsculos”. En estos
términos, el científico también se refirió al fenómeno El Niño, cuya capacidad
de crear patrones meteorológicos con consecuencias mundiales, son bien
conocidos.
Consideró además que el calentamiento global
no solo intensificará tormentas y sequías en el futuro, sino que las hará más
continuas. Puso como ejemplo la sequía que azotó Australia en 2009, acompañada
de una ola de calor y de fuertes incendios; en 2010 fue el caso de Rusia; en
2011 al sur de Estados Unidos y en 2012 a la zona central de Norteamérica.
“Veremos a quien le toca en 2013, seguramente
a otro continente”, manifestó Trenberth, quien es uno de los autores de los
informes del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático
(IPCC, en sus siglas en inglés) de 2003 y 2007.
¿Son estos “actos” naturales motivo de
preocupación para la sociedad actual? Muchos podrán concluir que tales
manifestaciones de la vieja Gea siempre han existido. Y sin duda que la verdad
les abala, ya que desde el diluvio bíblico, pasando por la erupción del Vesubio
que arrasó Pompeya, hasta los “ojos de dragón” o torbellinos que se tragaban
los galeones españoles, la historia nos ofrece hechos de que las catástrofes
naturales siempre han estado presentes en la existencia del hombre.
Sin embargo nos atreveremos a decir que nunca
lo han sido en la medida tan superlativa en que lo están siendo en nuestra
sociedad contemporánea. Los huracanes como ‘Sandy’ y otros cataclismos
naturales han sucedido siempre. Pero antes la información sobre ellos no se
extendía por el mundo con tanta rapidez y no llegaba a tanta gente. Ahora, con
el desarrollo del Internet, es imposible ocultar su fuerza devastadora y las
víctimas que ocasiona.
“Esta es una parte de la verdad, pero no toda
la verdad. En diferentes países del mundo existen estadísticas de los fenómenos
naturales peligrosos que revelan la tendencia al aumento en los registros de los
mismos, independientemente de si los medios de comunicación masiva hablan de
ellos o no”, Comentó el subdirector del Centro de Meteorología de Rusia Dmitri
Kíktev a un medio del país al ser preguntado sobre la devastadora y “misteriosa” ola de calor que azotó Rusia
como hemos comentado.
Mucho
se puede discutir sobre el calentamiento global, como ocurre con la firma del
Protocolo de Kyoto, considero como un complot mundial para el beneficio de los
países de occidente en contra posición de los países “fábrica” de las naciones
emergentes, como China, Brasil o México. Pero no tiene sentido negarlo. Durante
más de 160 años miles de personas han medido la temperatura del ambiente varias
veces al día en diferentes puntos de la Tierra. Anotaban los resultados de sus
mediciones, que más tarde fueron publicados y contrastados.
Es por
ello difícil imaginar que durante más de un siglo y medio existiese un complot
de meteorólogos para garantizar la firma del Protocolo de Kyoto en un futuro
lejano.
En los
últimos 150 años, el promedio de la temperatura mundial en el aire cerca de la
superficie de la Tierra aumentó 0,6°C. Los cambios de temperatura no son
homogéneos en todo el planeta: si en los polos ha subido casi 2ºC, en el
ecuador no ha cambiado prácticamente. La diferencia de las temperaturas entre
los polos y el ecuador disminuyó. Esto produjo el debilitamiento de los vientos
en las capas superiores de la atmósfera y, como resultado, cambios en la
circulación de las masas de aire, lo que traduce en fuertes tormentas y
huracanes.
Aunque
esta sea una explicación que pueda resultar poco satisfactoria de cómo el
cambio climático afecta directamente a las manifestaciones de la naturaleza,
tales como los huracanes, esperamos que sirva como alerta para nuestros
lectores. Ya que, aunque así fuese, la comunidad internacional no será capaz de
hacer más que, realizando un esfuerzo enorme, mantener la temperatura en los
niveles actuales.
¿Nos
encontramos ante los primeros pasos de un cambio de ciclo, como al que
apuntaban los mayas? La respuesta la hemos de dar nosotros como miembros de la
sociedad. Pero el sentir de la sociedad actual es este: Aceptación de los
mensajes recibidos. Para la humanidad, que recibe a diario la información
momentánea a través de la red de redes, es más práctico aceptar que en el mundo
todo cambia y el clima no es ninguna excepción, como lo está siendo la
economía, y adaptarse a estos cambios en vez de concienciarse a favor de ellos.